WebNovels

Chapter 3 - Amargas noticias

ESTOICO

No podía creer lo que Bocón me estaba diciendo, Hipo se fue, pero ¿por qué? eso era algo que todavía no entendía. Desde que Valka se había ido siempre me había preocupado por el, lo mejor que pude. Pero al parecer no lo suficiente. Siempre había sido diferente, siempre había sido menos vikingo que los demás. Sé que me equivoqué al decirle que ya no era mi hijo, pero luego enmendé ese error, aunque sabía que con Hipo no era tan sencillo como decir lo siento.

Mientras estaba sentado en la cama de Hipo contemplando su habitación que ahora lucía más vacía que de costumbre, no pude evitar recordar cuando Valka me dio la noticia de que estaba embarazada, fue un día memorable.

||||—||||—||||—||||

—FLASHBACK—

Yo había llegado a casa de un día largo y problemático, las embarcaciones no habían salido a pescar porque nuestro carpintero encargado de barcos no había terminado de hacer las reparaciones ya que se encontraba ocupado en reparar casas luego de la redada de hace unos días. La herrería había dejado de funcionar porque la chimenea se tapó, Así que eso significaba que Bocón tendría que usar todo el día para destaparla. Niños perdidos y otro sinfín de problemas, problemas y más problemas.

—Valka, llegué —dije con el peor de los ánimos, pero ahí estaba ella siempre sonriendo como si lo de alrededor no importara.

—Sígueme, ya casi termino la cena —eso sí me preocupaba, Valka nunca fue una buena cocinera que digamos, siempre acostumbrábamos comer en el Gran Salón con los otros, pero aun Así le seguí, el olor era agradable.

—¿Que tal tu día? —me preguntó de la manera más cordial, no es que no lo fuera, pero normalmente no hablábamos de estas cosas, preferíamos usar nuestro tiempo en otras cosas que no tuvieran que ver con mi labor como jefe o en su defecto yo le preguntaba que había hecho hoy, uno lograba enterarse de cosas interesantes, como que Phlegma Hofferson había quedado embarazada, o al menos esas eran las señales que estaba presentando.

—Fatal, lo único que quiero es dormir, y dormir —dije con la mayor de las frustraciones, lo único que quería es que el día llegara a su fin, pero al parecer no fue del agrado de Valka porque una ligera cara de tristeza se dibujó en ella, pero rápidamente fue reemplazada por una falsa sonrisa.

—Oh bueno, ya casi esta, Así que, porque no te sientas —Valka me respondió con la voz suave y melodiosa que siempre tuvo.

—Entonces ¿para qué me hiciste venir hasta aquí mujer? —deje salir un poco mi mal humor y me odiaba por eso. El matrimonio con Valka fue arreglado por nuestros padres. Pero para mí fue lo mejor que pudieron hacer, porque yo había tenido un enamoramiento por ella desde hace un tiempo, solo que no me hacía muchas ilusiones porque sabía que mi padre terminaría eligiendo quien sería mi esposa en base a lo que fuera más conveniente para Berk.

—Lo siento —se disculpó ella mientras empezaba a servir la comida en los platos.

—No importa, estaré en la mesa —mientras caminaba hacia la mesa me sentí fatal, no me gustaba ser así, tal vez ella solo quería ser agradable.

—Claro —le escuche decir y me pesó.

Más tarde esa noche. Mientras ya estábamos en la cama, todo se sentía tan extraño. Normalmente yo tomaba su mano o ella se acurrucaba cerca mío, pero ahora todo era tan distante y frio que me sentí más culpable.

—Lo siento, no debí haber sido tan grosero —me disculpé y rápidamente pude sentir la cabeza de Val sobre mi pecho. Rápidamente la abrace, realmente me había acostumbrado a esto que una noche sin ella no era lo mismo.

—Oh Estoico, está bien —la voz de Val sonaba más nerviosa de lo normal y la presión de su cabeza sobre mi pecho no era la de siempre, Así que algo iba mal.

—¿Que pasa Val…? —la aleje un poco, pero ella rápidamente se volvió a acercar para no dejar que la viera, ok eso significa que todo va mal…

—Nada —esta mujer cree que voy a dejar pasar esto…

—Oh vamos, te conozco de toda la vida, no puedes mentirme —Val negó sobre mi pecho con la cabeza.

—No es importante —susurró mientras se abrazaba más fuerte, realmente estaba dispuesto a dejarlo ir, pero no sé porque seguí adelante.

—Claro que lo es —le dije mientras nos enderezaba a ambos en la cama.

—Creo que tu día ha tenido suficientes cosas por hoy —su excusa era tan pobre que casi me daba ganas de reír, pero no quería que se cerrara más Así que me mantuve lo más serio posible.

—Vamos, dime —le rogué acariciando suavemente su rostro. Val era la chica más hermosa de Archipiélago, la verdad tuve mucha fortuna de ser quien lograra casarse con ella,

—Promete que no te enfadaras —me rogaba, realmente estaba empezando a pensar cualquier clase de locura y eso no era bueno, pero me sobrepuse para concederle lo que quería.

—Lo prometo —le dije y entonces empezó a balbucear,

—Bueno, yo —titubeó, no era común en ella.

—Vamos Val dilo ya, me estás matando —era verdad pensé que había hecho algo realmente malo y que tal vez me molestaría mucho.

—Bueno, yo estoy embarazada —lo dijo suave y pausadamente. Las palabras retumbaron en mis idos. Golpeaban el martillo del mismísimo Thor. El cuervo de Odín picoteaba mi cerebro y mi corazón.

—Embarazada —susurre y me levante de golpe dejando a Valka en la cama. El fuego que estaba creciendo en mi pecho era, era demasiado para ser contenido.

—¡Estoico, Estoico! —Valka gritaba tratando de llamar mi atención, pero yo simplemente estaba demasiado extasiado como para escucharla. A través de la ventana miraba Berk y al parecer todo el mundo dormía plácidamente. —Estoico lo siento, yo —no la deje terminar cuando tome una gran respiración y saque mi cabeza por la ventana.

—Voy a ser papaaaaa!!! —grite de felicidad.

—FIN DE FLASHBACK—

||||—||||—||||—||||

Lo demás es historia. Valka casi me golpea por hacerle pensar que estaba desanimado por la noticia de que estaba embarazada. Pero yo estaba demasiado emocionado como para concentrarme en sus reproches. Siempre le dije a Val que nuestro hijo llegaría a ser un gran líder y que sería más grande y fuerte que su padre. Val me odiaría de ver la decepción en mis ojos y mis palabras cuando Hipo creció y no era nada de lo que yo quería que fuera.

Lentamente abrí la nota de Hipo para mí.

"Papá

Para cuando leas esta nota, yo tendré que estar muy lejos de Berk, Por favor no me busques.

¿Recuerdas cuando estabas a punto de ir a buscar la isla de los Dragones y yo iba a empezar mi entrenamiento? Me dijiste que debía caminar, hablar y pensar como vikingo. Sé que ya soy una decepción para ti, agreguemos una más, no puedo ser eso que tú quieres que sea. Cuando era más niño enserio deseaba con todas mis fuerzas ser como tú, pero simplemente no puedo serlo, tal vez nunca lo sea.

Cuando dijiste aquella vez en la fragua de que por fin teníamos algo de que conversar, no te equivocaste, hemos llegado a ser dos desconocidos viviendo en la misma casa. Todo este tiempo me estaba ahogando en el desprecio de todo el pueblo que tú diriges y a ti pareció no importarte, parece ser que Estoico el Vasto no sabe todo lo que pasa en su isla, o no quiere saberlo.

Yo sinceramente espero que algún día puedas estar orgulloso por quien soy, no por quien tú quieres que sea. Ahora es tiempo de que yo encuentre mi propio camino, Chimuelo y yo buscaremos nuestro destino juntos. Sé que no soy como tú, jamás conocí propiamente dicho a mama, Así que lo que soy, lo que debo ser, debo descubrirlo por mí mismo y eso no puedo hacer en Berk.

Parte de esta nota la escribí cuando pensaba irme por primera vez, pero Astrid me detuvo. Por favor cuida de ella, Thor sabe que necesita una figura paterna a su lado, ella te admira mucho. Algún día volveré, no sé cuándo será.

Hipo Horrendo Abadejo III"

No hubo ninguna muestra de cariño, el dolor era demasiado como para contenerlo, deje caer la nota al suelo. La culpa me estaba carcomiendo. Hipo en el fondo se estaba yendo por mí culpa, todos estos años no preste atención a sus palabras, todos estos años su voz se fue achicando en mis oídos hasta el punto de no escuchar lo que él quería decirme. Todas esas veces que volvía con los ojos hinchados y algunas heridas en el rostro y yo simplemente le ignoraba diciendo que tenía que atender asuntos más importantes.

Ahora mi hijo se había ido y lo peor es que se fue pensando que aquí no podría ser Hipo, hasta cierto punto entendía su forma de pensar. Quería probarse a sí mismo. Quería encontrar un propósito y no quería la aceptación de Berk y la mía por haber matado un dragón enorme, sino simplemente por ser Hipo, por lo que era, por lo que tenía dentro y lo que yo jamás pude ver.

—Valka que he hecho —me susurré a mí mismo mientras las lágrimas salieron por mis ojos. Solamente había llorado había sido por Valka cuando ella se fue y luego cuando pensé que había perdido a Hipo. Ahora nuevamente cuando ese temor se había hecho realidad, me seque mis lágrimas con rudeza. No podía dejar que Hipo desapareciera sin más. No podía dejarlo ir, no podía cometer ese error. Sería el peor error de mi vida. Empecé a bajar rápidamente las escaleras para encontrarme con Phlegma tratando de contener a Astrid, quien logró zafarse de su control y salió corriendo.

—¡Astrid espera! —Phlegma trato de llamarla, pero Astrid simplemente no escucho.

—¿Que paso? —trate de sonar lo más centrado posible, pero el sentimiento tormentoso que se estaba dentro mío me ganaba y mi voz se agrietaba por momentos.

—Hipo dejo una nota para ella —Bocón dijo con la voz un poco entrecortada, mientras Phlegma miraba a Astrid correr colina abajo, seguramente buscando a su dragón.

—Bocón reúne a los jinetes de dragones ahora —necesitábamos de ellos para poder buscar a Hipo. Pero donde debíamos buscar, no sabíamos ni siquiera cuales serían sus intenciones.

—Pero Estoico, no creo que eso sea lo mejor —Bocón trato de persuadirme, pero yo estaba determinado. No detendría la partida de Hipo, pero quería que me escuchara por lo menos antes de irse.

—Bocón no lo repetiré —mi voz sonó más grave de lo que hubiese querido. Pero no tenía tiempo para discutir mis decisiones. Por más que se tratara de Bocón.

—Phlegma ve por tu hija la necesitamos —Phlegma asintió y luego salió a buscar a Astrid. Supongo que lo que sea que Hipo le escribió le llego hasta la medula y sería una de las primeras en ofrecerse en la búsqueda.

—Te voy a encontrar hijo —me prometí a mí mismo mientras enjugaba una nueva lágrima.

HIPO

Yo sabía que no podría estar completamente seguro de que Bocón convencería a mí padre de que no saliera a buscarme Así que me encargue de dejar varios señuelos en todas las direcciones para que su búsqueda resultara inútil.

—Es necesario amigo —Chimuelo solo me dio un pequeño gruñido de aprobación y despegamos de Berk con rumbo desconocido. Mientras más nos alejábamos y la silueta de Berk se perdía una nueva sensación de inseguridad y temor se apoderaba de mí.

Lo desconocido estaba ante nosotros. Los peligros ahora serian reales y nadie, absolutamente nadie estaría para reparar mis errores o desaciertos.

Mientras pensaba en lo que acaba de hacer, hice una pequeña suplica interna. Pidiendo por Berk, por mí padre. Por Bocón. Por la mama de Astrid y por Astrid. Para que pudieran olvidarse de mí y seguir sus vidas. Aunque supongo que eso no sería del todo difícil una vez que yo no este mas allí.

More Chapters