"Este lugar..." - dijo Barret mientras miraba alrededor al notar que por fin habían llegado a su primer destino, una enorme cueva oscura, cuya única fuente de luz parecía ser un trono de cristal brillante.
Vincent frunció el ceño mientras caminaba alrededor, sintiendo una sensación familiar, una que sentía que había olvidado por haber estado tanto tiempo durmiendo.
"¿Qué sucede, Vincent?" - preguntó Yuffie mientras miraba al 'joven' de cabello negro.
Vincent no respondió, él simplemente caminó hacia el trono blanco, solo para sentir cómo su corazón empezaba a latir con fuerza.
Sin siquiera pensarlo, el hombre de cabello negro corrió hacia el lugar, solo para sentir cómo su rostro palidecía al ver una persona que no pensó volver a ver - ". . ."
Yuffie, Barret y Cait Sith, rápidamente corrieron detrás de su compañero, solo para ver a una mujer en el trono.
"¿Quién es ella?" - preguntó Yuffie mientras fruncía el ceño, porque no se esperaba encontrar a alguien viviendo en un lugar alejado como este, mucho menos sin nada que le permitiera sobrevivir, como por ejemplo comida.
Barret simplemente miró a Vincent, quien estaba mudo por la sorpresa - "¿Tú la conoces?"
"Lucrecia" - respondió Vincent mientras caminaba al lado de la mujer y acariciaba su mejilla.
"¿Lucrecia?" - repitió Barret mientras recordaba dónde había escuchado ese nombre, solo para abrir los ojos, sorprendido porque recordó todo - "¿Ella es la madre de Sephiroth?"
Vincent asintió en silencio mientras notaba cómo la mujer de cabello castaño, empezaba a despertar - "Lucrecia..."
"Esa voz..." - murmuró la mujer mientras sacudía la cabeza, abriendo los ojos, mostrando una confusión que no podía ocultarse - "Parece que por fin me estoy volviendo loca..."
"Lucrecia..." - dijo Vincent mientras se mordía el labio - "¿Cómo terminaste así?"
"Incluso puedo sentir esa falsa preocupación" - murmuró Lucrecia mientras negaba con la cabeza, solo para notar al resto de personas - "¿Y quiénes son ustedes? ¿Algunas especie de manifestaciones de mi personalidad retorcida?"
"Amiga, sé que estás loca, pero no tienes que culparnos a nosotros" - dijo Yuffie mientras le daba una mirada en blanco - "Tal parece que tanta soledad te afectó más de lo que piensas"
Lucrecia frunció el ceño mientras sentía cómo su consciencia regresaba - "Ustedes..."
La mujer nuevamente sacudió la cabeza antes de mirar a Vincent, y notar cómo no había cambiado nada desde la última vez que se vieron, aunque eso era imposible, después de todo, Vincent era un humano normal.
"Lucrecia..." - dijo Vincent mientras tomaba las manos de la mujer - "Me alegra verte con vida"
"Vincent..." - murmuró Lucrecia mientras volvía a mirar a su antiguo compañero, solo para notar un detalle - "Tus ojos..."
Vincent guardó silencio mientras soltaba un suspiro pesado - "Muchas cosas pasaron luego de tu desaparición, Lucrecia..."
Lucrecia cerró los ojos mientras recordaba el pasado, sus momentos con Vincent durante los experimentos en [Nibelheim], su decisión de ser la madre e incubadora del proyecto [Sephiroth], su casi muerte durante el embarazo debido a la inyección de células [JENOVA], el dolor durante el parto que todavía lo recuerda, su depresión postparto, sus múltiples intentos de suicidio, los cuales fueron frustrados por las células [JENOVA] en su interior, incluso los múltiples ataques de locura al saber que su hijo estaba creciendo sin una madre, hasta el momento en que perdió la cordura cuando escuchó la voz desconocida de una mujer diciéndole que su hijo había muerto.
". . ." - Lucrecia se quedó en silencio con una mirada vacía, observando el techo oscuro de la cueva.
"Lucrecia" - murmuró Vincent mientras les pedía a sus compañeros que los dejaran solos por unos minutos.
Yuffie intentó decir algo, solo para notar cómo Barret negaba con la cabeza.
Cait Sith simplemente salió, siendo seguido poco después por el resto de sus compañeros.
"Vincent..." - murmuró Lucrecia mientras cerraba los ojos - "Mi bebé... ¿Está muerto?"
Vincent se quedó en silencio unos segundos antes de cerrar los ojos y pensar detenidamente cómo responder esto, aunque luego de unos minutos de impaciencia de la mujer, él abrió los ojos y respondió con honestidad - "No, Sephiroth sigue con vida"
La mirada de Lucrecia cambió drásticamente.
Vincent soltó un suspiro de alivio al ver cómo la mujer parecía haber recuperado un poco de su vida, aunque todavía no era suficiente - "Él es fuerte, mucho más fuerte de lo que piensas"
"Mi bebé..." - murmuró Lucrecia con una feliz sonrisa, una expresión que no había mostrado desde que tuvo a su bebé en sus brazos luego de ese tormentoso parto - "Él sigue con vida..."
Vincent simplemente guardó silencio mientras esperaba a que la mujer se calmara.
"Hojo..." - murmuró Lucrecia con una expresión conflictiva.
"Muerto" - respondió Vincent mientras apretaba su puño - "Murió a manos de su propia locura"
Lucrecia asintió en silencio porque esto era algo que ella se esperaba - "Y ¿[Jenova]?"
"Muerta también" - respondió Vincent con seriedad - "Eres libre, ya no hay nada que te ate a este lugar, incluso es posible que puedas reunirte con tu hijo, tal vez puedas ayudarle a caminar por el buen camino"
La expresión de Lucrecia cambió cuando escuchó esto mientras le preguntaba a su antiguo compañero de qué estaba hablando.
Vincent rápidamente explicó todo lo que sabía, sobre el pasado de Sephiroth como [SOLDADO], así como sus acciones luego de volver a despertar de su sueño, finalizando con lo que estaba sucediendo, y el cómo él les estaba ayudando con esta situación tan precaria.
Lucrecia se tapó la boca con las manos mientras las lágrimas corrían por sus mejillas - "Lo sabía... mi bebé está sufriendo por no tenerme a su lado..."
Un enorme sentimiento de culpa invadió a la mujer, aunque luego de unos minutos este desapareció como si nunca hubiera estado, debido a que un nuevo sentimiento de deber empezó a crecer dentro de ella.
"Todavía no es tarde" - murmuró Lucrecia mientras apretaba su puño con firmeza - "Todavía puedo ayudar a mi bebé"
Dicho eso, Lucrecia se levantó de su trono de cristal, sintiendo cómo su energía aumentaba a un ritmo impresionante.
Vincent miró a la mujer con preocupación mientras luchaba con la idea de decirle algo.
"Tranquilo, Vincent, estoy bien" - sonrió Lucrecia al notar la preocupación del único hombre que de verdad la amó, aunque esto solo hizo que ella sintiera una nueva oleada de culpa - "Vincent... yo..."
"No digas nada, Lucrecia" - murmuró Vincent mientras cerraba los ojos - "Mis acciones, fueron mis propias decisiones, no tienes que sentirte culpable por no devolver mi amor"
Lucrecia soltó un suspiro pesado antes de asentir, aunque al mismo tiempo pensó que todavía no era tarde para esto, más cuando obviamente los dos ya no eran humanos, y era posible que vivieran más tiempo del que les gustaría admitir.
Tal vez, solo, tal vez, esta era una señal.
Vincent simplemente guardó silencio mientras sentía los cambio en la mirada de la mujer que había sido la madre del más grande genocida de toda [Gaia].
"¿Crees que puedas llevarme donde mi bebé?" - preguntó Lucrecia mientras miraba al hombre de cabello negro, directo a sus ojos rojos como rubíes.
Vincent se quedó en silencio, pensando detenidamente en si esto sería una buena idea, después de todo, Lucrecia todavía poseía las células de [JENOVA], aunque esta lucha no demoró mucho en tener un vencedor.
Entre su corazón, y su cerebro, Vincent decidió seguir al primero, más que nada porque para él, en este mundo no había nadie más importante que Lucrecia. Todos los sentimientos que él había ocultado por el dolor de su pasado, estaban resurgiendo ahora que ella estaba de nuevo a su lado, y no iba a dejar que nadie los separara esta vez.
"Entiendo, voy a hablar con mis compañeros" - dijo Vincent mientras cerraba los ojos - "Aunque hay una última cosa que me gustaría preguntarte"
Lucrecia levantó una ceja, aunque rápidamente sintió cómo su corazón empezaba a latir con fuerza, pensando en cómo su compañero iba a preguntarle si quería escapar con él como había sucedido en el pasado.
"¿Has visto un arma de fuego por aquí?" - preguntó Vincent mientras miraba alrededor.
La expresión de Lucrecia se oscureció, aunque rápidamente soltó un suspiro pesado, pensando que su compañero había cambiado más de lo que pensaba, aunque esto era posiblemente debido a los experimentos que él había sufrido luego de su desaparición.
"Ahora que lo mencionas" - murmuró Lucrecia mientras revisaba su bata de laboratorio y sacaba una pistola negra - "Esta es mi arma de defensa personal, la cual con el paso del tiempo cerca de este trono de cristal, ha cambiado drásticamente"
"Esto es" - murmuró Vincent con las pupilas contraías, sintiendo cómo sus manos empezaban a temblar ante la presencia de la pistola de la madre de Sephiroth.
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[Death Penalty (U)]
Efecto 1 [Penitencia]: 20% probabilidad de muerte instantánea.
Efecto 2 [Juicio]: 30% probabilidad de causar el estado [pena de muerte], matando al objetivo luego de 60 segundos a menos que este último mate al usuario, o el estado [coma], reduciendo su vitalidad al mínimo y causando [inconsciencia].
Efecto 3 [Caos]: Los ataques de [Death Penalty] son daño puro, y este no puede ser reducido de ninguna forma.
Efecto 4 [Amalgama]: Los efectos de [Death Penalty] pueden ser usados fuera de [Gaia], pero los objetivos pueden resistir los efectos adversos si la diferencia de poder entre usuario y enemigo es alta (Resistencia aumenta en un 10% por cada 5 niveles de diferencia).