Ceremonia del Despertar
Al amanecer, Hei Yu Ling se alistó y se preparó para la ceremonia del despertar. Su mente no pudo conciliar el sueño anoche; renacer no es tan fácil como lo hacen parecer los protagonistas de novelas. Sentía preocupación e incertidumbre por lo que está por venir. Aun siendo un demonio de otro mundo, coloquialmente conocido en el mundo Gu a los provenientes de otros mundos, su ventaja de conocer la historia de Reverend Insanity lo hacía sentir más seguro, pero la incertidumbre sobre en qué año se encontraba lo dejaba inquieto. Tras bañarse y salir, su mente se sumergió en los recuerdos de su anterior anfitrión.
Hei Yu Ling tenía dos padres: un anciano del clan llamado Hei Yu Ning de rango cuatro, quien falleció durante una misión del clan, y su madre Hei Lin Su, una maestra Gu de rango tres que murió de la misma enfermedad que el propietario anterior de su cuerpo. Su padre, al ser un anciano de rango cuatro, le dejó una buena herencia retenida por el clan hasta que cumpliera la mayoría de edad a los 18 años. Mientras tanto, vivía de la manutención brindada por la tribu por ser huérfano. Al repasar estos pensamientos, sintió tristeza por la vida previa del anfitrión, que debió de ser miserable.
Al llegar a la escuela de enseñanza de la tribu, se notaba un gran movimiento, con estudiantes de su misma edad dirigiéndose a los salones de clase. En este mundo, el sistema de tribu tenía una jerarquía social más o menos similar a la de la época medieval. Los jóvenes que lograban despertar su apertura se convertían en Maestros Gu, activos valiosos para la tribu. Por el contrario, quienes no despertaban su apertura llevaban una vida común y corriente, equiparable a la de un esclavo. Al ingresar al aula, muchas miradas se posaron sobre él, sorprendidas de verlo. Aunque no muchos sabían de su enfermedad crónica, una amiga de la infancia estaban al tanto de la historia del anterior anfitrión. Una chica de cabello negro corto se le acercó rápidamente con marcada preocupación.
"Hei Yu Ling, ¿qué haces aquí? No deberías estar en cama. Estás enfermo; te dije que descansaras", le espetó con genuina preocupación.
La miré de reojo con una sonrisa perspicaz. "Yuna, no te preocupes, ya me siento mejor. Creo que ya estoy bien", dije sonriendo, aunque ya no era el Hei Yu Ling que ella conocía. Los recuerdos del anterior anfitrión aún estaban presentes en mi mente. La conocía desde la infancia, una chica atrevida y divertida, bastante terca y mandona. "Si claro, no me mientas Yu Ling, te conozco. Sé que no estás bien". La chica obstinada que recordaba de memoria seguía igual. Le di un pequeño toque en la frente, como un gesto de cariño entre amigos. Refunfuñó y nos sentamos. Al cabo de un rato, entró por la puerta un anciano con la tez opaca.
"Jóvenes, hoy es la ceremonia de despertar, como ya saben. Mi nombre es Hei Su Ning, seré el instructor de la academia para aquellos que se conviertan en Maestros Gu. Síganme", dijo el anciano, y todos nos levantamos para seguirlo. Por el camino, Yuna no paraba de preguntar sobre mí, a lo que respondía con pensamientos superficiales. Llegamos a un lago ubicado en una cueva especial de la tribu. Para despertar la apertura Gu, los humanos debían pasar una pequeña prueba que consistía en atravesar un lago con muchas pequeñas luces, gu de esperanza de rango 1.
La clasificación dependía de cuán lejos pudieras llegar. Si dabas cierta cantidad de pasos, te convertías en un Maestro Gu con aptitudes de grado D, C, B o A. La aptitud era crucial, representaba la cantidad de esencia que podías almacenar en la apertura, siendo A la mejor y D la peor. Todos se emocionaron al ver las brillantes luces, especialmente Yuna, cuyos ojos brillaban. A diferencia de mí, ella provenía de una familia de Maestros Gu de rango tres, por lo que estaba bien informada sobre el procedimiento.
"Yu Ling, debes llegar lo más lejos posible en el lago. Si lo logras, podrás obtener una gran aptitud y ser nutrido por la tribu", me advirtió. Simplemente asentí hacia ella, agradecido de tener a alguien que se preocupaba por mí en este nuevo mundo. Seguramente la mantendría cerca, aunque solo éramos amigos, el futuro era incierto.
A diferencia de Fan Yuan, quien era más frío que el Polo Norte, mi mente era más pragmática y no me importaba tener aliados desde temprano. El anciano comenzó a llamar nombres al azar, y cada persona nombrada se acercaba al lago y comenzaba a caminar. Muchos no daban ni tres pasos, lo cual era señal de imposibilidad de despertar la apertura y serían mortales por el resto de su vida. Escuché el nombre de mi amiga: "Hey, Yuna Min." La observé: tenía una mirada decidida y clara. Le di una palmadita en el hombro, lo cual me miró de perfil y comenzó a avanzar. Deseaba que despertara una aptitud alta para que su futuro fuera grande. Aunque no era tan importante, con mis conocimientos podía ayudarla a convertirse en un Maestro Gu inmortal sin problemas.
Yuna avanzaba paso a paso, cinco, diez, veinte pasos; seguía firme avanzando. Se detuvo justo en el umbral de ser un Grado A y empezó a regresar. Muchos otros estaban envidiosos: ser un Grado B te daba una ventaja bastante decente, y tu futuro al menos llegaría a ser rango 3, posiblemente cuatro con gran esfuerzo. Finalmente, escuché mi nombre: "Hei Yu Ling, adelante." "Creo en ti, Yu Ling," me hizo un gran gesto de aliento Yuna. Le sonreí y comencé a avanzar.
Con mi dedo dorado de Domesticador de Bestias Legendario, mi futuro era ilimitado, pero aún así, ser un Maestro Gu también me ofrecía muchas opciones. Comencé a avanzar paso a paso. Sentí un cálido líquido entrando en mi cuerpo: era el Gu de la Esperanza haciendo su trabajo. A medida que avanzaba, el sentimiento era más claro; algo se estaba formando en mi cuerpo: la apertura Gu. Me detuve en la etapa temprana del umbral de rango A. Mi aptitud era apenas rango A, pero aún así era del 85% de acumulación, una clara ventaja en comparación con aptitudes de Grado B que variaban entre 50 y 79% de almacenamiento de esencia, por no mencionar las de Grado C, que eran aún más bajas.
Volví junto a los demás. Muchas caras me miraban, algunas en envidia, otras con deseo y otras con alegría, como Yuna. El anciano me sonreía de oreja a oreja.
En la prueba del clan, solo dos aptitudes de rango A son evidentes: un joven llamado Hei Min Su, hijo de uno de los ancianos del clan, y yo,diez personas de grado B. La mayoría son hombres, con solo tres mujeres contando a Yuna, y otros veinte de grado C. Este era el promedio habitual en una super tribu. "Los que han manifestado su apertura, síganme", indicó el anciano. Las treinta y dos personas presentes lo siguieron.
"Yuling, eres increíble, me superaste. Pero no creas que eres mejor. ¡Yo seré la más fuerte, seguro!", alardeaba Yuna a mi alrededor. "¿Qué haré contigo? Desde ahora tendré que cargarte, ya que poseo más aura de protagonista", le susurré de forma irónica. Ella puso los ojos en blanco y me sacó la lengua.
Al llegar a una nueva instalación donde se impartían conocimientos para ser un maestro Gu, cada uno tomó asiento. Yuna se sentó a mi lado. Las clases eran variadas, desde teoría hasta combates prácticos. El anciano de la academia se puso de pie en el asiento de enseñanza y comenzó a gesticular con la mano.
"Muchos de ustedes tienen familiares Gu, otros no. Ser un maestro Gu implica muchas responsabilidades. Como miembros de la Tribu Hei, una de las super tribus de las llanuras del norte, debemos mantener un poder de combate en constante crecimiento para contribuir al clan”, explicó el anciano.
Mientras divagaba sobre la importancia del poder en la tribu, mi mente se enfocaba en mi apertura. Esta era un espacio dentro del maestro Gu donde fluía una energía llamada esencial celestial. Los Gu Masters refinan y cultivan su apertura, la cual puede albergar a los gusanos Gu, materiales del Dao. Existen Gu de diversos tipos y caminos, y al dominarlos, los Maestros Gu pueden utilizar sus habilidades especiales a través de la esencia celestial. Los Gu Masters tienen cinco rangos, del uno al cinco, siendo el cinco el más alto en el camino mortal y la mayor potencia en este campo.
La Tribu Hei, al ser una super tribu, tiene una jerarquía más amplia. En lo más alto se encuentran los Ancianos Supremos, Gu Inmortales que han ascendido de rango mortal a inmortalidad. Estos son el pilar de la fuerza de la tribu Hei, residiendo en la tierra bendita del aguila de hierro.
Por debajo estaba el sistema de tribu mortal dirigida por el líder de clan Hei, un Gu Master de rango 5 en etapa pico. Por debajo estaban los ancianos de rango cuatro, que tenían un nivel medio de poder de combate en la tribu. Luego estaban los Gu Master de rango tres, los cuales ocupaban el rango de soldados dentro de una super tribu. Mientras tanto, en el clan Gu Yue de nivel medio de Fan Yuan, los ancianos eran gu master de rango y eran importantes. Yu Ling repasaba estos datos cruciales de la tribu. Siendo parte de una gran super fuerza de las llanuras del norte, su inicio era más sólido que el de Fan Yuan, por ejemplo; sin embargo, también era una quimera. El clan Hei parecía intimidante por fuera, pero en realidad era una de las superfuezas más débiles de las llanuras del norte. En la historia, fueron asediados por Gu Inmortales de otras tribus, perdiendo muchos tesoros y Gu Inmortales en la pelea hasta que tuvieron que subordinarse a otra super tribu llamada Bai Zhu. El futuro de esta tribu era bastante sombrío, pero conmigo a cargo, olvídate de esa trama. Si no puedo liderar la tribu, sería un fracaso como protagonista. Conmigo, la tribu despegará y se convertiría en la más poderosa de las llanuras del norte.