WebNovels

Chapter 12 - Chapter 7:The Village Algorithm (Part 2)

El viaje intelectual de Elias por el pueblo continuó, ahora interrumpido por nuevas entradas sensoriales. Mientras su madre, Sarah, lo cargaba, su suave balanceo era un ritmo reconfortante en contraste con la cacofonía de nueva información. Empezó a discernir la música ambiental del pueblo: no solo el traqueteo de las herramientas y el murmullo de las voces, sino las armonías subyacentes de la vida cotidiana. El crujido de la bomba de un pozo lejano, el rítmico corte de la leña, el mugido del ganado en un pasto cercano: cada sonido era una frecuencia distinta, un componente de un complejo algoritmo auditivo. «Una sinfonía de rutina», registró, mientras su mente mapeaba meticulosamente el origen y el propósito de cada sonido. Encontró una peculiar satisfacción al reconocer estos patrones, una melodía silenciosa que subrayaba la predecible, pero infinitamente analizable, existencia humana.

Al pasar junto a las ventanas abiertas, fragmentos de sonido se escapaban del interior de las casas. Un sonido en particular le llamó la atención: la familiar y crepitante voz de una radio, pero esta vez informando de noticias de todo Estados Unidos. Para Elias, este fue un flujo de datos sorprendentemente nuevo. Escuchó referencias a ciudades lejanas, figuras políticas y avances tecnológicos: palabras y conceptos completamente ajenos a su microcosmos rural. «Variables geográficas y sociales no identificadas detectadas», latía su voz interior con una nueva emoción. Esta influencia externa despertó un interés inmediato por aprender estas palabras desconocidas y comprender el mundo más allá del valle. Comenzó a catalogar mentalmente cada término desconocido, con la intención de compararlos más tarde con cualquier texto disponible en la biblioteca del pueblo.

Al regresar a la granja, Elías mantuvo un constante estado de adaptación y mejora. Bajo el manto del secretismo, trabajó incansablemente para optimizar el maíz y otros cultivos. Implementó cambios sutiles, casi imperceptibles, en la composición del suelo, experimentó con técnicas de retención de agua e incluso desarrolló repelentes de plagas primitivos, pero muy efectivos, utilizando compuestos naturales. «Optimización del rendimiento a nivel micro», concluía, observando cómo los cultivos respondían con mayor vitalidad. Sus experimentos privados eran su compromiso silencioso con el perfeccionamiento de los sistemas naturales que lo rodeaban, convirtiendo los datos brutos en un crecimiento tangible y próspero.

Sus singulares observaciones a veces se extendían a los jóvenes del pueblo. De vez en cuando se acercaban a él, atraídos por su serena intensidad, o quizás por un reconocimiento tácito de su carácter inusual. La mirada fría y analítica de Elias a menudo les provocaba un destello de nerviosismo, una instintiva inquietud ante su forma de pensar diferente. En ocasiones, ofrecía consejos poco convencionales a estos jóvenes e incluso a mujeres más pequeñas, hablando en términos de eficiencia o resultados lógicos en lugar de apoyo emocional. «La estrategia óptima para recolectar bayas implica X e Y, no Z», solía decir a un grupo con dificultades para recolectar, ignorando por completo las sutilezas sociales de su interacción. O, a una joven que se quejaba de una herramienta rota, podía ofrecer una solución precisa, casi clínica, para repararla, desconcertándola con su franqueza. Fundamentalmente, incluso mientras ofrecía estas reflexiones, Elias mantenía una deliberada normalidad, evitando cualquier atisbo del profundo intelecto que lo impulsaba. Se reducía a un segundo plano, un fantasma de genio entre la vida cotidiana, asegurándose de que su verdadera naturaleza pasara desapercibida.

Una nueva fascinación comenzó a florecer en la mente de Elias: la música. Empezó a crear melodías él mismo, no con instrumentos, sino manipulando sonidos naturales. Descubrió la resonancia de un tronco hueco, los diferentes tonos del agua goteando en diferentes recipientes, el ritmo único del viento al mecerse entre las ramas. Encontró una extraña relajación en el proceso, liberando su mente de cálculos complejos mientras simplemente exploraba el sonido puro. «Patrones armónicos identificados. Una configuración de datos no utilitaria, pero satisfactoria», señaló su voz interior, encontrando un placer diferente en esta nueva forma de expresión.

Una mañana, al despertar, el suave repiqueteo de las gotas de lluvia contra el cristal se convirtió en el centro de su atención. No solo oía la lluvia; oía el impacto individual de cada gota, calculando su fuerza, su trayectoria y su contribución al sistema meteorológico general. Esto condujo a avances significativos en su investigación meteorológica, y su mente se convirtió rápidamente en un "fenómeno frío" mientras procesaba vastas cantidades de datos atmosféricos y predecía patrones meteorológicos con una precisión escalofriante.

Impulsado por una creciente necesidad de un espacio seguro y privado para sus experimentos cada vez más complejos, Elias tomó una decisión silenciosa y profunda: construiría una base secreta en las profundidades del bosque. Sin conocimientos agrícolas previos, comenzó a trabajar la tierra con una comprensión innata de sus propiedades, como un granjero experimentado. Excavó cuidadosamente una cueva primitiva, cuya entrada ocultó hábilmente. Luego, entrelazó meticulosamente hojas grandes y robustas con hilos especiales, de origen propio, de fibras vegetales, creando una cubierta notablemente resistente y camuflada para la entrada. Este acto instintivo de autoconservación y ocultamiento se consolidó en su interior. Tras horas de trabajo solitario, sintiendo la silenciosa satisfacción del esfuerzo físico y la planificación estratégica, regresaba a la granja. Al ver a su madre, la abrazaba instintivamente, su pequeño cuerpo se aferraba a su calor, mientras su cerebro cuántico registraba en silencio la compleja cascada química de afecto y seguridad que fluía a través de ambos. Fue un punto de datos vital en su estudio continuo de las emociones humanas, una conexión fugaz pero esencial antes de retirarse una vez más a su mundo de genio oculto.

More Chapters