Abrió los ojos, pero la luz del sol le golpeó en el rostro haciéndola quejarse, todavía no se estaba acostumbrando a ese cuerpo, pero la sensación era rara, se sentía tan suyo y a la vez como si estuviera usando ropa de quien no debía… incluso se miró las manos, los pies, la ropa ensuciada por el suelo, posiblemente había tenido un accidente en ese mismo momento.
Aún estaba analizando el alrededor, junto a ella y otros un tanto lejos, estaba un grupo de gente, todos vestidos de manera demasiado formal, no como la que siempre conocía para trabajar, más rural, más sencilla, más simple, todos preocupados más por el castigo que por ella, por qué en absoluto la habían tocado para revisarla.
La pequeña niña se incorporó sólo de su parte superior quedándose sentada, su alrededor era totalmente diferente, recordaba la anterior plática pero el cambio de ambiente fue demasiado. Ver sirvientes alrededor, una caballeriza, un caballo sostenido nerviosamente por otro sirviente y la suciedad en su cuerpo así como la tierra alrededor, todos con una expresión de terror total.
—! Señorita! ! señorita! ¿¡Está bien!?— preguntó un mayordomo corriendo hacia ella—, !Imbécil! !te dije que no la subieras al caballo! !El señor de la casa nos castigará!
—Pero es que… ¡es que ella me obligó, no podía hacer nada!
—Callense, hacen mucho ruido— dijo la niña tranquilamente pero sonando fría
Y todos obedecieron pero ella se mantuvo ahí, se sintió la cabeza y sentía el dolor de un golpe, pero sin herida más solo el chichón. Además que si voz infantil, era demasiado ruda en el tono, como si siempre estuviera gritando y ahora que estaba calmada era dura
»Tienen suerte que no saliera sangre, larguense, déjenme
—!Pero señorita Amarilis-
Y ella miró a quien habló, con una intensidad que lo incómodo, todos se fueron y ella se levantó. Dejando a un sirviente un poco más mayor que ella, después terminó de levantarse.
—¿Qué? ¿No vas a ayudarme a sacudirme?
—¿Ah? Ha, !lo lamento!
Ella sacudiéndose como podía y el sirviente su cabeza y espalda.
—Necesito un baño, preparalo mientras voy hacia ahí
—!Si¡
El mayordomo se fue corriendo mientras ella caminaba y miraba a su alrededor… más se detuvo.
—¿Tu no viste nada, verdad?— preguntó al sirviente que aún sostenía al caballo
—!No, nada! ¡¿De que habla señorita Amarilis?¡
—Asi me gusta
Mientras caminaba seguía mirando su alrededor, había visto el tamaño y forma de la casa solamente en las imágenes en el libro que tenía cuando era niña, había sido porque una amiga le dijo que lo leyera y le gustó, no la historia, sino la construcción de cada línea argumental, cada trasfondo para preparar la supervivencia en los personajes sin alejarse de sus personalidades…
Todos los héroes y villanos de la historia habían tenido pasados difíciles, unos más que otros, pero quién más le gustó, era la villana, era exigente, dura, fría y más que nada, no tenía miedo a usar como ella a los demás para sus fines, aunque como toda historia, ella era vencida por la principal, la heroína y los demás buenos, derrumbando lo que la villana hizo, aunque al final eran solo dos cosas, exiliarse o ejecución, la mayoría de las llamadas, rutas, eran ejecución y pocas exilio, así que eso era algo injusto… más cuando la votación popular de esa historia decidió ejecución.
—Injusto
Por eso le gustaba más la villana, alguien que no tenía casi nada y subió como podía a lo más alto, ver a alguien así caer de esa manera, ser cortada su cabeza la mayoría de veces era malo, y ahora ella podía hacerlo, podía hacer lo necesario para sobrevivir y más que nada…
—!NO COMETERÉ LOS MISMOS ERRORES QUE ELLA! ! EXILIO! !MI SEGURO DE VIDA ERES TÚ¡ !HARE LO NECESARIO PARA LLEGAR A TI¡
Sabía que no importaba lo que hiciera, tenía que hacer si o si esa ruta, porque hasta el mismo semi-dios se lo dijo, era más viable que la ejecución. Así que solo tenía que hacer lo que le dijo y asegurarse hasta en lo que no, que el exilio sea la ruta más perfecta posible y para eso…
»Tengo que ser la mejor, la mejor en todo, usar a todos, hacer de todo, ser todo… para caer en blando sobre lo que deseo… si, así será, !!ASÍ SERÁ¡¡
Lo primero que debía hacer sería anotarlo, sabía que podía dejarse llevar pero esas tres cosas eran lo más importante en ese momento.
Después del mejor baño de su nueva vida, fue a su habitación y escribió tan fuerte como podía en una libreta.
°°No dejes de ser la malvada.
°°°Arreglar ciertas cosas que la principal no pueda
°° SALVARSE DE LA EJECUCIÓN
Todo eso más repetido y marcado en cada página hasta el cansancio.
Para que decir que se rió, se rió lo más fuerte que podía. Por eso hablo justo como la Amarilis original… pero desde ese momento ya solo sería ella.
La hora de la cena llegó y ella fue con su sirviente a la mesa principal.
No sabía mucho de cortesía de antes, menos si este lugar era del tipo medieval, inglés de etiqueta, del tipo como decían o simplemente dejarse llevar, pues en la novela apenas decían algo sobre los modales, así que solo esperó, más la puerta se abrió fuertemente en un sonido que hacía que todos inevitablemente volteasen a ver quién venía.
De ahí entraron dos personas, la pareja que vendría siendo sus padres, el señor y la señora de la casa, ella se levantó a un lado y vió como su padre movía la silla para que su esposa se sentara, después él fue a su lugar y lo hizo por sí mismo.
—Buenas tardes, padre, madre
Al escuchar eso, ellos dos miraron a su hija, era una mirada rara pero después la ignoraron un poco.
—Buenos tardes, Amarilis
—Buenos días
Ella se sentó después y miró hacia ellos pero decidió no decir nada. Los sirvientes llegaron con la comida y ella miró eso, era más natural que lo que ella comía antes, podía sentir aún el calor de la cocina en el pollo frente a ella así como la frescura de los vegetales a un lado, nada malo que decir sobre el vino o cualquier otra bebida servida, todo se veía… más natural a lo que ella estaba acostumbrada antes.
«Si, esto me va a gustar » pensó mientras trataba de evitar babear por ver eso
Más antes que nada tomó una servilleta y la puso en su cuello… después volvió a mirar a sus padres por qué sintió que algo estaba mal con ella… o así lo sentía.
—... ¿Pasa algo, padre, madre?
—...
—...
Los sirvientes hicieron por ellos lo que ella hizo y entendió enseguida eso.
—... Tengo hambre, lamento si fui impertinente
—No hija… no, solo, fue raro
—Mucho, come, no nos esperes, te veo realmente con hambre — dijo su madre
Y ella algo apenada lo hizo, como pudo la verdad, pero cuidando que no ensuciara la mesa.
Podía sentir las miradas extrañas de los sirvientes y pocas de sus padres… pero era normal… comiendo más allá de lo que una niña podía servirte
—Termine, gracias
—...
—...
Otro error más, sabía que la villana era malvada, pero no sabía que lo era desde niña y menos así.
—...
—Hace no mucho, me enteré de algo— dijo su padre
—¿Sobre qué sería, padre?— preguntó tratando de evitar como se estaba sintiendo fuera de lugar
—Oí que te caíste de un caballo
Y eso llenó de pavor al sirviente a lado de ella.
—Si, así fue— respondió ella como si nada—, me subí por qué así lo quise ¿Es malo hacer lo que yo quiera?
Preguntó antes de que siquiera su padre dijera algo.
—Amarilis, eres hija de la prestigiosa casa Faldole, ¿Que crees que pasaría si algo te pasa?— preguntó su madre algo preocupada
—Se lo que pasaría madre, pero de algo estoy segura, esté sujeto a lado mío pagaría por eso y estoy de acuerdo, más ahora estoy aquí, por algo es que hay arena en ese lugar, solo fue un golpecito, si fuera en lugares duros como aquí, ¿Realmente crees que este tipo seguiría de pie o siquiera respirando? Querida madre
Y todo mundo se quedó callado, nadie esperaba algo como eso y al parecer era lo que ella hacía.
—Solo ten cuidado
—No volverá a pasar, madre, con permiso, gracias por preocuparte, en serio, padre, si algo me pasa, haz lo que quieras con este tipo, mientras no sea algo serio, es mío
—... Si, así será
Y se levantó para irse de ahí, dejando a sus padres solos con los demás.
—... Es tal como esperaba… es nuestra hija
Y ellos continuaron, ella se fue al jardín de esa mansión y tenía en la mano su abanico.
—Amarilis Faldone Dramull… siento tomar tu vida, veo que moriste siendo una niña muy especial… no te preocupes, los protegeré de lo que voy a hacer… te lo prometo, o mi primer nombre no es Danaeli
El tiempo pasó y la primera etapa se veía venir exactamente dos semanas después.
Ella estaba nuevamente en el caballo, pero está vez más con cuidado, con el sirviente igual ahí mientras le enseñaba a montar.
—Ahora llevelo al galope
—Si…
Y el caballo poco a poco empezó a desacelerar, hasta detenerse.
—Si, así, lento
El caballo se detuvo y parecía tranquilo a volverse loco. Ella bajó del caballo por sí sola, está vez sin caerse.
»Bien hecho señorita Amarilis
—Lo sé, debo darte el crédito por enseñarme así, pero mejor digamos que fue empate
—Como usted diga
Él se fue a dejar el caballo y ella a cambiarse su vestimenta.
—!Ahaa! !la entrepierna me está matando¡— gritó susurrando mientras se quitaba todo
Después de eso volvió a las caballerizas, pero había una conmoción.
—!Sujetalo, Sujetalo!
—!Eso intento! ¡Es muy fuerte!
Y esos gritos acompañados de varios relinchos podían escucharse al igual que los demás caballos alterados por el ruido que igual relinchaban.
Ella se acercó y vio a algunos tipos con lazos mantener a la fuerza a un caballo manchado, no era tan adulto pero sí muy fuerte, en un punto una patada de un pie del caballo tiro a uno de esos y todo se derrumbó, los demás no sabían cómo sostener más y no resistieron, el caballo se soltó y salió de su lugar.
—! Señorita Amarilis¡
Ella podía ver la furia del caballo, la locura en sus ojos y la furia en sus pisadas por salir corriendo de ahí, ella se hizo a un lado y el caballo salió disparado para alejarse lo más rápido que podía.
»! Señorita Amarilis, ¿Está bien?!
—Me gusta
—¿Eh?
—!ESA MIRADA ME GUSTA! !ME ENCANTA¡
Y corrió hacia otro caballo, se subió y tan rápido como podía lo hizo perseguir a ese caballo, todos se quedaron sin saber que estaba pasando.
El caballo loco pasó por un lado de la casa y todos miraron eso, para después ver a otro más con Amarilis encima para alcanzarlo.
—¿Esa no es?
—¿Eh?
—! MÁS RÁPIDO, MÁS RÁPIDO¡
La persecución salió de los terrenos de la familia y siguió por los caminos principales, ella podía sentir el cansancio en el caballo que montaba.
»!Solo alcanzalo, alcanzalo un poco! ! vamos, demuestra de qué están hechos los caballos de la familia Faldone! !Vamos! ¡Vamos!
Y como si eso le diera ánimos, el caballo aceleró aún más, la velocidad era más de setenta y nueve, podías ver el polvo detrás por la carrera y quién estaba en eso totalmente por cumplir su objetivo.
El caballo loco desaceleraro un poco.
»!Ahora, ahora¡
Y el caballo de ella se acercó, estando a la mitad del lomo, ella enseguida y como pudo salto al otro, el caballo la sintió y desaceleró aún más, ella se sostuvo lo más fuerte que podía del cuello con todo su ser, el caballo se agitó lo más fuerte que podía, saltos, giros, intentos de mordidas a ella, pero por ser pequeña apenas alcanzaba a rozar su vestido.
Todo hasta la tarde, el caballo seguía intentando librarse de ella, pero el agarre era casi infernal para una niña de esa edad, podías escuchar las respiraciones fuertes del caballo, pero más que nada.
—!VAMOS! !VAMOS! !¿YA TE CANSASTE!? !VAMOS VAMOS VAMOS¡
Pero era más que obvio que se cansó por todo.
»!Chico! !aquí¡
Y el otro caballo se acercó y le dió una patada en los muslos traseros, tirándolo y ella saltando antes que eso.
»!Vamos, vamos! ¡VAMOS! ¡MÁS! ¡MÁS¡ !MÁS¡
Ella seguía gritando enfrente del caballo loco, insistiendo tanto como podía.
»!LA MALDITA ENTREPIERNA ME ESTÁ MÁS QUE MATANDO Y ES INSOPORTABLE! ! PROBABLEMENTE YA DEJE DE SER VIRGEN POR TU CULPA, ASI QUE TE LO DIRÉ DESDE AHORA, ERES MÍO, TOTALMENTE MÍO Y SOLO ME OBEDECERAS A MÍ, A NADIE MÁS! ¡SI TE VEO HACIENDO ALGO CON QUIÉN YO NO QUIERA, CON QUIÉN YO NO DIGA QUE PUEDES, INVENTARE EL PEGAMENTO Y TE ENVIARÉ PARA QUE SEAS EL PRIMER MATERIAL PARA SU CREACIÓN! !¿ENTENDIDO?! ! ENTENDIDO¡
El otro caballo estaba a lado de ella y parecía también mirarlo muy seriamente así como Amarilis. Y por primera vez en su vida, podía sentir un terror profundo.
Nadie estaría tan loco como para perseguirlo, menos soportar tanto tiempo encima de él.
Siempre todos a la primera vez que se montaban, él los tiraba y pisaba, sean hombres, mujeres, todos experimentados, todos novatos, no había nadie que pudiera soportar los movimientos casi eternos de él… y una niña se agarró con uñas y dientes, con todo su ser y logró tirarlo al suelo, justo como él a los otros… por qué había algo diferente en ella.
»eres mío hasta que me aburras ¿O quieres otra carrera?
El caballo se incorporó y antes que nada, se levantó en dos pies frente a ella, incluso pateando en el aire, pero no la lastimó, solo pateó el suelo con esas patas y se calmó, Amarilis se subió en él y dió la orden de dar vuelta.
No sin antes mirar su alrededor, no reconociendo para nada dónde estaban ahora.
Tardaron medio día en llegar, no hubo casi problemas por qué su padre y unos sirvientes igual de rápido habían ido tras ellos.
Claro que hubo castigo y golpes de paternidad, pero lejos de eso, nadie fue herido seriamente.
A la mañana siguiente ella estaba cabalgando en el lomo de ese mismo caballo por dónde debía, como si nada, como si fuera una experta, pero eso sí, nadie que no fuera ella se podía acercar.
—Tenemos un trato, si alguien se atreve a tocarlo sin mi permiso, espero y sea ambidiestro por qué le gusta la carne humana, no es broma
Cada mañana ella iba a darle de comer, frutas, agua, lo necesario para alimentarlo, no había suplementos o algo así, solo era pura y natural crianza además de adiestramiento.
Lo cepillaba cada mañana y cada tarde que podía y si, aquel caballo se mantenía tan quieto todos los días, comportándose incluso mejor que los demás, pero lejos de eso, nadie podía acercarse a pocos centímetros sin una amenaza de mordida de su parte.
—¿Y cómo planeas llamarlo hija?— preguntó su madre a lado de ella y mirando al caballo
—No se, ¿Lechuga? !Ah! ¡Lechuguiño¡
—... No, eso es demasiado… infantil si me lo permites
—... ¿Cómo debería llamarlo entonces? No sé los nombres que usan aquí… que conozca digo
—... Bueno, corre muy rápido, es feroz y parece maldecir a todo aquel que lo mira… ¿Qué te parece Axtriz, la estrella que suele pasar en el cielo cada 13 años, se dice que es el ángel caído que la diosa desterró por órdenes del mayor
—¿Axtriz? Me gusta, así será, gracias madre
—De nada, por cierto, hay algo que quiero hablar contigo
—¿Si?
—Es sobre tu compromiso, tu prometido va a llegar en una semana, no quiero que lo trates mal ni lo asustes por favor, hemos peleado esto durante tanto tiempo, que honestamente si me molestaría que hagas algo que no debes
—... Lo intentaré, pero madre… ¿Está segura que es un buen… ¿Hombre?
—... Si, la verdad es que si, y estoy segura que podría aguantarte en cosas como estas
Y el caballo relincho un poco al sentirse algo juzgado.
—Entendido, así será madre— dijo Amarilis
Las dos se fueron, no sin antes la niña arrojarle una manzana y el caballo atraparla con la boca.
—... La gran familia Ferguster… ya veo, ya es hora de empezar