Welt Yang se ajustó sus lentes y bajo su bastón.
"Muy bien, escuchen con atención. Esta parte es un poco más compleja. El Sea of Quanta, o Mar de Quanta, es el abismo que rodea el Imaginary Tree. Es donde terminan las hojas que han sido podadas, destruidas o que han colapsado por su propia inestabilidad."
Himeko aportó su parte de la información.
"En otras palabras, es el vertedero cósmico. Pero no solo eso. También es un refugio para realidades incompletas, fragmentos de mundos que no lograron sostenerse. Allí el tiempo y el espacio se comportan de forma impredecible."
Welt lo retomó.
"Dentro del Sea of Quanta, la realidad es fragmentada. Las leyes físicas de cada hoja dejan de aplicarse correctamente, y las criaturas que habitan allí, si es que se les puede llamar criaturas, no siguen ninguna lógica conocida."
Himeko continuó.
"Algunos mundos del Sea of Quanta sobreviven como burbujas, aisladas del caos circundante. Pero otros simplemente son trampas mortales. Entrar ahí no es precisamente un paseo."
*****
Variantes de Personas: Multitudes de Mismas Caras
"Ahora hablemos de las variantes. Dentro de cada rama y sus respectivas hojas pueden existir diferentes versiones de una misma persona. Estas variantes pueden compartir el mismo nombre, apariencia o recuerdos, pero sus experiencias las hacen completamente distintas."
Himeko sonrió.
"Por ejemplo, puedes encontrar un Welt Yang que sea un maestro sabio y otro que sea... no sé, un idol?"
Welt Yang suspiro.
"Y lamentablemente, ambas versiones son igualmente reales dentro de sus respectivos contextos."
Himeko sonrio y tomó un sorbo de su café.
"Hay variantes que ni siquiera son humanas, o que nacieron en contextos radicalmente diferentes. La esencia básica puede ser la misma, pero sus decisiones, entornos y vivencias los hacen individuos únicos."